miércoles, 9 de junio de 2021

TETRA PLAQUETTE DE TU CUERPO. José Carlos De Nóbrega

 


XLVII

El poeta Bandeira decía a Teresa

que tenía un par de piernas estúpidas,

e incluso su cara parecía una pierna.

Dios se asomaba en las aguas deslúcidas

 

del río removido en pulsión daltónica.

Este sonetista reivindica a Dios

trino y su poética arquitectónica,

cuando se trata de Beatriz, mi Sol:

 

Cada pierna lisita y tan firme

exporta su esculpido perfecto

a rúas -nadie puede discutirme

 

su poesía curva- en el trayecto 

que va del Fidias lelo al permitirme

ser atado de ambas en sirga y Amor resurrecto.

 

XLVIII

SONETO EXCESIVO POR UN CUARTETO DE MÁS

Cuerpo de Garúa en carne ennoblecida

de mujer alud que pinta Beatriz,

se desliza por escala subida 

y bajada por ojo filial de Alma.


Óvalo inclinado y sublime, asienta

en mí quietud que sonríe y enamora

la mirada del sonetista, lenta

y solícita del pardaje ahora,


… que lo funda a esa piel trigueña,

Esa terredad llovida en la boca

Entreabierta, cuya lengua enseña

Dientes caníbales a por la loca…

 

Deglución poética de mi relieve

Entero, sus montes y ríos profundos.

Me veo retado por pecho que mueve

 

A ensoñación besada en rotundos

Movimientos a gruta en las nueve

Jornadas u orgasmos vinculantes de ambos mundos.

 

7/6/2021

   

XLIX

El gentil cuerpo de Beatriz, ni museo

Que esterilice su andar de muy lúdico

Garbo, ni mucho menos mausoleo

Que encajone el mirar impúdico.

 

Sensualidad que anda con el pudor,

Colmena noble de explosiva miel

Que aliña mi sonetario en Amor

Entusiasta por la vida en el riel,

 

Ora recto, ora sinuoso, que arriba

A la estación de utopía promisoria

Construida en mutua querencia creativa.

 

Nos poseemos dos en siendo una historia,

Una carnadura que se escriba

A plenitud del goce en ars libre y amatoria.

 

7/6/2021

         

L

Beatriz es dialéctica de la curva

Que repta, en su silencio, mi cuerpo

Desnudo y a su merced. ¡Ay!, que mi turba

De yoes la deja invadir todo el puerto

 

De mi carne tan ansiosa y tan extática.

Nos imponemos lengua, la república

Y la religión en fusión galáctica

Sin vicio privado ni virtud pública.

 

Ella es templo eviterno de mi culto

Terráqueo y también supracorporal:

Sus ojos de agua en que me ausculto

 

El mejor hombre en vasto y libre erial

Con dos ojivas que nutren tumulto

De piernas que nos soportan nexo celestial.

 

7/7/2021



domingo, 6 de junio de 2021

Triptico del mes de Mayo. Jose Carlos De Nobrega


XLIV-XLVI

Por ahora por acá y hoy por aquí, 

Renuncio a éstas mis fobias efemérides:

Yo, contraplatónico, el Ser en sí

Y para ti, ubicando las Hespérides


Entre isla de Madeira y tu Jardín,

Metáfora esencial de terredad

Garuada por vos en poema sin fin,

Me muevo almanaque sin ruindad.


Los capitanes claveles de Abril

Rebelde en Lisboa, trajeron un Mayo

De brega, sangre y luz en simple dril.


Tus manos me escarban como ensayo

Y crónica de pulso sol sutil

Que me rehace rojo, negro y rayo.


6 /6/2021


LXV

Primavera que sí llega, Beatriz,

Porque me la llueves de a poquito,

Al punto que Atlas y Hésperis, bis

A bis, reflotan Atlántidas, mito


Y coito que magnifican barricadas

De París a Colombia, alba Gaza

Que se afirma el vivir a bocanadas

De Eros nuestro encrespado y de raza.


Sacaste de quicio a infame Peste

En mi Cueva de Platón y el mundo,

Proyectándola a la Nada, el Este


Salvó su crepusculario profundo,

En insólito silencio arcipreste

De tu buen amor en que me refundo.


6/6/2021


XLVI

En Mayo nos hicimos capicúa,

Palíndromo y poesía alegórica

A contracorriente que se adecúa

A nuestra cadencia tanto meteórica


Como reposada. Por eso, mi bien,

El poema que somos se puede leer

En todos los sentidos de la sien

Hecha tabla en que nos podemos ver.


Espejo de agua que nos multiplica.

Nos regocija río cauto y manso,

Cuando guarda tumulto en la plica


Fluvial que sólo en gentil remanso

Podemos abrir y cerrar en rica

Hartura atemporal sin descanso.


Redondilla Adosada

No temas amor de mi vida,

No soy descamisao peronista,

Sino desnudo sonetista

De mi Beatriz Rondón sentida.


6/6/2021



viernes, 4 de junio de 2021

Sonetos bestiarios de Socrates para Alma. Jose Carlos De Nobrega


INTROITO

Poco antes de morir, tuvo a bien Sócrates

Componer a tu Alma, Garúa, y dejar

Conmigo estos sonetos, mas no a Hipócrates:

Pues la Atenas matasanos le dio a tomar


Cicuta aliñando impulso homicida.

A Alma encantarán poemas peludos

Y escamosos de Sócrates en vida

Que perpetúa a Esopo en los sesudos


Y lúdicos laberintos de toda Ella,

Hija de Ti que se conversa Sol

En polifónica selva de ágil doncella,


Cronopia que anidaste girasol

De Van Gogh en matriz que aún destella

Agua serena al mundo con o sin quitasol.


El Gato y las Ratas

Ido el dolor de la pierna por grillos

De presidio inútil, me llega el placer

De escucharte, Alma, en píos ensueñecillos:

"Compon y ejercítate en música a Ser


Pleno y libre para muy bien morir

De filosofía y poesía de ordeño".

Alma mía, dejo de filosofar y a tañir

Cuatro me apresto relajando ceño.


Érase una casa invadida de ratas

A la que acudió un gato muy glotón.

Minino que se dio banquete y patas


Pa'que te tengo las que en pelotón

Huyeron. Felino se hace papanatas

Muerto, mas grey roedora no es carne

                                                    de atracón.


(Moraleja: que los hombres sensatos

Al vivir en carne propia maldad

De otros, se sacuden los zapatos

Y no ceden a hipócrita bondad).



La Gata y Afrodita

Una gata enloqueció de Amor

Por guapo muchacho del vecindario.

Fastidió y maulló a Afrodita rumor

Bien rogativo, felino e incendiario.


Roza que le roza las pantorrillas

Bien torneadas, Venus de ella se apiada,

Pintándola ninfa de maravillas

Que ata al chico en lindura despiadada.


Pero curiosidad divina mata,

Alma mía, tanto a posesiva nínfula

Como a la muy depredadora gata.


Verificando zoantropía de ínfula

Bizarra, soltó a la niña una rata

Que la dejó gata náufraga sin Amor

                                                   ni ínsula.


(Asimismo la humana villanía,

Por más que cambie de vestidura,

De apariencia y huela a epifanía,

Mala actitud muestra su dentadura).



Foto de Mairelys Gonzalez

El Atún y el Delfín

Y ahora, Alma mía, va este tercero

En discordia con los jueces de Atenas,

Venales e impíos, poema duro y artero,

Banquete nuestro y para ellos las penas


Por venírseles pronto y pa'encima.

Mientras Beatriz prepara nuestra cena,

La última más sabrosa de mi estima,

El atún y el delfín a la escena.


... Digo a la mar serena: Atún tun tun

Perseguido por gula delfín

Que os llevó del agua a costa betún.


De muerte en patíbulo de postín,

El arenal caliente, dijo el Atún

Al cetáceo: La muerte nos une, so pillín.


(Nada es más lírico y consolatorio

Que compartir la propia desdicha

Con juez y verdugo en citatorio

Que iguala con el reo, la verdad sea muy                                                             bien dicha). 



El Loro y la Gata

Te regalo un loro boca sucia

En tu cumpleaños, mi querida Alma, 

Para que te rías de su gran astucia

Bochinchera dándonos tanta calma:


A mí en despedida irreverente

Pero esperanzada; a ti, mi cronopia,

Que inicias vuelo a contracorriente

Del mundo mustio que nada nos copia.


Pobre gata que reclama al loro

Su descarado griterío bonchón,

Mientras ronronea sumisa el decoro.


El plumífero aúpa tono burlón

Que desconsuela maullido incoloro

No autorizado por comedia, ají y sazón.


(Fábula y fiesta a las que no acceden

Ni críticos malévolos en sepulcros

Blanqueados, porque odios no proceden

Aquí en halitosis de los pulcros).